Por más que oficialmente se niegue el carácter plebiscitario de los comicios del 27-S, lo cierto es que todos los partidos se volcaron en agosto de 2012 en la campaña electoral catalana. La antigua Convergéncia Democrática de Catalunya (CDC) y Esquerra Republicana (ERC) concurren coaligadas en Junts pel Sí tras la ruptura de CiU.
Desde el
anticapitalismo, y por tanto desde posiciones absolutamente contrarias a la
alta burguesía representada tradicionalmente por el pujolismo que hereda Artur
Mas, también defiende el independentismo la Candidatura d’Unitat Popular (CUP),
que ya tenía tres escaños en el Parlament. Hay un actor nuevo en el escenario:
Catalunya Sí que es Pot, la formación que agrupa a Podemos, Iniciativa per
Catalunya (ICV), Verds y Esquerra Unida i Alternativa (EUiA).
La campaña es
un combate entre el sí y el no al independentismo en el que todo lo demás
(posiciones ideológicas, propuestas económicas, sociales o de regeneración
democrática) queda muy desdibujado. Llegan a escucharse verdaderos disparates.
Los soberanistas arman un relato en el que intentan hacer creer que la
independencia libraría a Cataluña de los efectos de la crisis y de la
globalización mientras PP y Ciudadanos, escoltados por grandes empresarios,
banqueros e instituciones financieras, alertan de una especie de apocalipsis si
el independentismo triunfara.
Los
resultados del 27-S dan una clara mayoría parlamentaria a la suma de fuerzas
soberanistas (87 de los 135 escaños en juego), pero no en votos. El
independentismo se lleva el 47,8 de los sufragios (Junts pel Sí mas la CUP); el
bloque constitucionalista (Ciudadanos, PSC y PP) logran un 39,1 por ciento y Catalunya
Sí que es Pot, que apoya el “derecho a decidir” pero no se define oficialmente
respecto a la independencia, se estrena con 11 diputados y un 8,9 por ciento de
apoyo ciudadano. Unió no logra superar el mínimo del 3 por ciento y se queda
sin representación.
Cataluña queda, sociológicamente como estaba:
partida por la mitad. Con una participación masiva, del 77 por ciento, el
independentismo no es apoyado por más de la mitad de los votantes y, por tanto,
deja tocada la hoja de ruta unilateral que plantean Mas, Junqueras y la CUP con
el apoyo de las asociaciones independentistas.
El otro gran triunfador del 27-S es
Ciudadanos, que se convierte en segunda fuerza del Parlament al subir de 9
actas y un 7,5 de apoyo electoral a nada menos que 25 escaños y el 17,9 por
ciento de los votos.
En el bloque antiindependentista, el gran derrotado
claramente es el PP, que baja de 19 a 11 escaños y se deja casi 5 puntos de
apoyo pese al pronosticado tirón electoral de Xabier García Albiol. El PSC baja
también de 20 a 16 diputados.
Sin embargo, la formación encabezada por Podemos,
empeora no sólo los vaticinios demoscópicos sino los resultados que habían obtenido
en 2012 ICV- EUiA 13 diputados y el 9,9 por ciento de apoyo.
A esta
situación tan inexplicable hemos llegado, benditos lectores. Hace muchos años,
por tierras cartageneras, tenía un servidor un jefe honesto, socarrón sin
límites y con una retranca hilarante que ante este tipo de situaciones tan
antinaturales dilapidaba con la frase.”¿Qué saldrán de estas “follaeras?”. Me
sumo, sin duda alguna, a la opinión de mi jefe respecto a este acto
sexo-electoral tan disparatado.
POSDATA.- Sin los
datos y el análisis del señor Maraña, don Jesús, no hubiera podido hacer este
escrito. Para un redunde más sociológico y menos numérico sobre el actual
problema de Cataluña consultar en este acogedor blog con fecha 16 de agosto de
este mismo año mi escrito titulado: “La independencia de Cataluña contemplada
como ciudadano y como demócrata.
Para aliviar
ánimos, os dejo, no podía ser de otra modo, con una canción de Serrat de 1974
del disco “Canción infantil” titulada ”Soneto a mamá”; en ella plantea el tema
de la huida de casa, de la búsqueda de horizontes nuevos, de acumular experiencias
concretas de la vida, sin mirar atrás.
No es que no vuelva, porque me he olvidado
de tu olor a tomillo y a cocina.
De lejos, dicen que se ve más claro,
que no es igual quién anda y quién camina.
Y supe que el amor tiene ojos verdes,
que cuatro palos tiene la baraja,
que nunca vuelve aquello que se pierde
y la marea sube y luego baja.
Supe que lo sencillo no es lo necio,
que no hay que confundir valor y precio,
y un manjar puede ser cualquier bocado
si el horizonte es luz y el rumbo un beso,
No es que no vuelva porque me he olvidado:
es que perdí el camino de regreso,
de tu olor a tomillo y a cocina.
De lejos, dicen que se ve más claro,
que no es igual quién anda y quién camina.
Y supe que el amor tiene ojos verdes,
que cuatro palos tiene la baraja,
que nunca vuelve aquello que se pierde
y la marea sube y luego baja.
Supe que lo sencillo no es lo necio,
que no hay que confundir valor y precio,
y un manjar puede ser cualquier bocado
si el horizonte es luz y el rumbo un beso,
No es que no vuelva porque me he olvidado:
es que perdí el camino de regreso,
mamá
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"Si el último recurso es defender España a hostias, España ha perdido"
ResponderEliminarEn este caso Monedero tiene razón.