El colectivo de personas que se identifican con el eslogan "No en mi nombre" realizaban ayer tarde una concentración en el Paseo Luis Golf para manifestarse en contra del tratado de la UE que pretende devolver a Turquía a familias enteras de que en estos momentos malviven en unas condiciones casi inhumanas en Idomeni, pequeño pueblo situado en la frontera griega-macedonia.
La primera en intervenir, Emilia Bautista, dijo "...el desconocimiento y el menosprecio humanos ha originado actos de barbarie ultrajantes para la conciencia de la humanidad, y se ha proclamado, como la aspiración mas elevada del hombre, el advenimiento de un mundo en que los seres humanos, liberados del temor y la miseria, disfruten de la libertad de palabra y de la libertad de creencias".
A continuación se dio lectura a unos cuantos artículos de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, documento adoptado por la Asamblea General de las Naciones Unidas en la Resolución 217, el 10 de diciembre de 1948 -tres años después de finalizar la Segunda Guerra Mundial- en París:
Artículo 1: Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y consciencia, deben comportarse los unos con los otros.
Artículo 2: Toda persona tiene todos los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición.
Articulo 3: Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona.
Artículo 5: Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles o degradantes.
Artículo 7: Todos son iguales ante la Ley y tienen, sin distinción, derecho a igual protección de la ley. Todos tienen derecho a igual protección contra la discriminación que infrinja esta Declaración y contra toda provocación a tal discriminación.
Artículo 9: Nadie podrá ser arbitrariamente detenido, preso ni desterrado
Artículo 14: En caso de persecución, toda persona tiene derecho a buscar asilo y a disfrutar de él en cualquier país.
Artículo 25: Toda persona tiende derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar y, en especial, la alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médica y los servicios sociales necesarios.
Las apocalípticas imágenes que todos los días nos estan llegando de Idomeni ponen de manifiesto que los dirigentes de los paises ricos de Europa no han sabido -o no han querido- darle una solución digna a los problemas que sufren unas familias que huyen de una guerra cruel y que han aplicado el lema "Sí, pero en mi puerta no". Estas estremecedoras imágenes nos estan recordando lo peor de la raza humana: falta de misericordía con el necesitado.
Tener que recordar artículos proclamados hace 67 años en defensa de la dignidad de un pueblo que busca asilo en Europa significa que algo no estamos haciendo bien en defensa de los Derechos Humanos. No quiero pensar lo que han debido sufrir muchos pueblos a lo largo de la Historia cuando no había medios de comunicación, como ahora, que transportan, en tiempo real, la tragedia y el drama a nuestras casas y conciencias.
"Disculpe el señor", de Joan Manuel Serrat.