Las respuestas que estan dando algunos de los imputados a la Justicia son de aurora boreal. Nos toman por tontos. Los medios de comunicación nos las han llevado en bandeja a nuestras casas estas últimas semanas. Urdangarin, Hernández Moltó, Modesto Crespo, Roberto López, Blesa, Rato, Jordi Pujol....Todos han declarado en el mismo sentido: yo era animador sociocultural.... pasaba por allí en ese momento... nunca sospeché que se estuviera malversando.... yo no tenía responsabilidad ya que esta recaía en fulano... desconocía las cuestiones tanto financieras como contables de las que me acusan ustedes.... yo no era comisionista.... mi fortuna se lo debo a mi padre que me quería mucho... nunca pensé que el dinero de las tarjetas fuera de procedencia ilícita.... lo advertí en reiteradas ocasiones, pero no me hiceron caso..... a mi no me consta nada de eso que usted me pregunta señor Juez.....yo creía que las dietas que nos daban se debían a nuestro esfuerzo, sacrificio y desvelos por la empresa...
Estos señores, ¡con estas respuestas!.... ¿ocupaban cargos públicos?. Si. ¡Aunque cueste creerlo! Estos señores ocupaban altos cargos públicos, pero no tenían responsabilidad alguna. Se llevaban el dinero, pero era para causas nobles como socorrer a ONgs. Se gastaban lo que no era suyo, pero lo hacían sin mala intención y sin malicia. Como San Pedro, han negado por activa y por pasiva lo que hicieron y lo que vieron. Arruinaron entidades públicas y todavía estamos esperando oírles decir "perdonen ustedes". Los adjudicatarios de obras y servicios públicos les arrimaban una suculenta comisión, mínimo 3%, que ellos destinaban a obras de caridad. Financiaban proyectos inviables como Aeropuertos e instalaciones para hacer Películas pero, como el dinero no era de ellos, ¡no tenían por qué dudar si lo que se estaba realizando era una barbaridad!. Estafaron conscientemente a pequeños inversores, mientras ellos se subían inconscientemente el sueldo -que ya era alto- para celebrarlo...
En estas dos semanas de procesos Judiciales, solo una persona no ha mentido. ¡Una sola! Me estoy refiriendo a Monserrat González que declaró nada más detenerla la Policia: "Si. Yo maté a Isabel Carrasco", que era la Presidenta de la Diputación Provincial de León. Hace dos semanas, en el transcurso del Juicio, el Juez le preguntó si se arrepentía del crimen. Su respuesta, como en la canción "El preso nº 9", fue contundente: "No me arrepiento, señor Juez". No estamos hablando del mismo delito. Pero, no cabe duda de que este tipo de respuestas no es, ni de lejos, el que están dando los que arruinaron económicamente España. Los mismos que, por su negligencia, dejaron en la calle a muchas personas. Ya no nos acordamos, pero algunos se suicidaron...
Henandez Moltó le dijo al Juez que él era "animador sociocultural". El Juez lo ha condenado a dos años de cárcel y al pago de una cantidad simbólica: no llega a 30.000 euros cuando el Estado, o sea nosotros, tuvimos que poner de nuestros impuestos más de 7.000 millones de euros para que el estruendo no fuera mayor. No hemos adelantado mucho: sigue teniendo más pena robar una gallina en España, que desvalijar una Caja de Ahorros. Hay apuestas en los distintos medios. Dicen que, al no tener antecedentes, no entrará en la cárcel aquel que le decía a D. Mariano Rubio que lo mirara a la cara. "Es más fácil que entre un pecador en el reino de los cielos que un político vaya a la cárcel". Quieren poner coto a estos desmanes. Pero no se lo toman en serio.
Mª Cristina de Borbón-Dos Sicilias -viuda de Fernando VII y abuela de Alfonso XII- se casó en segundas nupcias con Agustin Fernando Muñoz. Entre los dos montaron un extraordinario y lucrativo negocio con la sal, el ferrocarril y el comercio negrero. Una descendiente suya y su querido marido estan, en estos momentos, siendo juzgados por el mismo delito: aprovecharse de la situación y del apellido. De esto hace 170 años. ¿Confianza en que cambie? Más bien poca. Porque el dinero público, como dijo una Ministra de Felipe Gonzalez, no es de nadie. ¡Ningún Juez la procesó!
Condenado a muerte, el "Preso nº 9"... nunca se arrepintió.
Los "modernos atracadores de ahora" ni se arrepienten,
ni piden perdon ni devuelven lo robado.
De la soberbia en sus puestos, pasan a mentir en los Juzgados
con tal de no asumir nada de nada de nada.
Como máximo, algunos colaboran con Fiscalía
para que les reduzcan la pena.
¿Su aliado? El rápido olvido de sus "andanzas" ....por parte de el pueblo.
Esta es la letra de la canción de Magdalena Álvarez,
que llegó a Ministra de Fomento con Felipe González.
LOS AMOS DEL MUNDO
ResponderEliminarUsted no lo sabe, pero depende de ellos. Son ello quien lo van a mandar al paro en nombre de un tres punto siete. Usted nada tiene que ver con esos fulanos porque es empleado de una ferretería o cajero de Pryca.[…] Usted no los conoce , pero esos conductores suicidas que circulan a doscientos por hora en un furgón cargado de dinero van a atropellarlo el día menos pensado.[…] No crean riqueza sino que especulan. Lanzan al ruedo combinaciones fastuosas de economía financiera que nada tiene que ver con la economía productiva.[…] Esto no puede fallar, dicen. Aquí nadie va perder. El riesgo es mínimo.[…] Y en cuanto sale bien la primera operación ya están arriesgando más en la segunda, que el chollo es el chollo, e intereses de un tropecientos por ciento no se encuentran todos los días.
Y de pronto resulta que no. De pronto resulta que el invento tenía sus fallos, y que lo de alto riesgo no era una frase sino exactamente eso: alto riesgo de verdad. Y entonces todo el tinglado se va a tomar por saco. Y esos fondos especiales, peligrosos, que cada vez tienen más peso en la economía mundial, muestran su lado negro. Y entonces,. Oh prodigio, mientras que los beneficios eran para los tiburones que controlaban el cotarro y para los que especulaban con dinero de otros, resulta que la pérdidas, no. Las pérdidas, el mordisco financiero, el pago de los errores de esos pijolandios que juegan con la economía como si jugaran al Monopoly, recae directamente sobre las espaldas de todos nosotros.[…]
Y esa solidaridad, imprescindible para salvar la estabilidad, la paga con su pellejo, con sus ahorros y a veces con su puesto de trabajo Mariano Pérez Sánchez y los millones de infelices marianos que se levantan cada día a las seis de la mañana para ganarse la vida.
Esto es lo que viene me temo. Nadie perdonará un duro de la deuda, pero nunca faltaran fondos para tapar agujeros de especuladores y canallas que juegan a la ruleta rusa en cabeza ajena.- Así que podemos ir amarrándonos los machos. Ése es el panorama que los amos de la economía nos deparan, con el cuento de tanto neoliberalismo económico y tanta mierda, de tanta especulación y de tanta poca vergüenza.
ARTURO PÉREZ-REVERTE
CON ÁNIMO DE OFENDER 2-001