El martes de madrugada entraban a robar en cinco chalets en los parajes Viñales y Vereda justo un año después de haber sido desvalijados. En aquella ocasión entraron en 30 viviendas...¡a nadie que le pase!

                             

  Cuando Jaime, uno de los afectados, me contaba ayer mañana que justo un año y dos días después de haberle desvalijado el chalet le habían vuelto a entrar, estaba alterado... Lo acababa de llamar la Guardia Civil para comunicarle que le habían entrado, a él y a otros cuatro, que tienen las viviendas en el paraje los Viñales y a otro en la Vereda de Santa Ana. 

No es para menos. "Voy a ver si me tranquilizo. Tengo rabia y el corazón destrozado", me decía al mismo tiempo que me mandaba por wasapp varias fotos donde se ve como le han arrancado la reja haciendo palanca, entrando por la ventana y revolviéndole la vivienda. Todavía no le había dado tiempo a contabilizar lo que le faltaba. De momento, me decía,  "me falta uno de los perros que tengo suelto en la parcela".

  En otras viviendas cercanas a la suya se han llevado placas solares, televisores, baterías además de revolverlo todo, como en su casa, en busca de cosas de valor. Y es que llueve sobre mojado: el año pasado entraron a treinta viviendas la misma noche. Esta vez ha sido en menos, pero sospechan que podría ser también una banda, posiblemente asesorada por gente de aquí a juzgar por los movimientos que detectaron el día anterior. El pasado año, entre lo que se llevaron y los daños ocasionados, la broma le costó a Jaime  9.000 euros

Desde entonces, estos vecinos se pusieron de acuerdo para realizar tareas de vigilancia, con paseos nocturnos por la zona afectada cada dos noches, alternándose entre ellos, variando el horario y, siempre, en colaboración y el conocimiento de la Guardia Civil. Anoche no salieron por ser fiesta.

 La indignación es que la vigilancia no haya servido para ahuyentar a los ladrones que han vuelto a entrar en sus viviendas. Sospechan que a partir de las cuatro o las cinco de la madrugada. ¿Con qué ánimo van a salir el próximo día?  

   Esto... ¡se pasa ya de castaño oscuro!. La seguridad ciudadana en nuestro pueblo sigue siendo una asignatura pendiente. Me consta que preocupa a la Guardia Civil, a la Policía Local, al Alcalde, al Concejal de Seguridad, al Subdelegado del Gobierno, al resto de Concejales....pero, a quienes más les quita el sueño es al ciudadano que ve como un año después vuelven a tocarle las pelotas, perdón por la expresión, y vuelve a sentirse indefenso e impotente.

    Porque, una cosa es leer la noticia de un robo en un periódico o conocerlo por la televisión y otra, muy distinta, es enfrentarte a la inseguridad un año después cuando ya empezabas a olvidarte de la pesadilla. ¡A nadie que le pase!.

   Ni que decir tiene que la situación anímica que les queda a los afectados es de total intranquilidad y desasosiego al ver que sus viviendas están al albur de gente que no se para en barras para atentar contra la propiedad privada. A estas alturas, ya no les valen paños calientes, proyectos, estadísticas, vamos a hacer, tenemos en proyecto...porque lo que quieren es una poca seguridad que, de momento, nadie les garantiza. 

    "Nos cuesta mucho esfuerzo llevar un sueldo a nuestra casa para tener que encontrarte con este desbarajuste", me decía Jaime esta mañana. Y es que tiene bemoles el asunto: que estés realizando una labor de vigilancia nocturna y que te entren a robar. Todavía te quedas con peor sabor de boca. 

Cuando estuve en Ámsterdam, hace unos pocos años, me llamó la atención que ninguna vivienda tenía rejas en las ventanas de las plantas bajas a fachada o patio. Le pregunté al que nos acompañaba y me miró extrañado. No entendía el significado de la reja. 

   Cuando le expliqué, tampoco entendía que aquí un Juez/a decrete orden de prisión a alguien después de haber entrado a robar a una propiedad privada veinte veces. Lo que lo dejó perplejo fue cuando le dije que hemos aprobado siete Leyes de Educación distintas en el corto periodo que llevamos  de Democracia...