Médico de profesión y mireno por convicción, Juan Solera Albero, sera el encargado de pregonar este año las Fiestas de Moros y Cristianos. Hoy, 5 de septiembre, a eso de las 11 de la noche, después de saludar a todas las Capitanías la comitiva llevará al pregonero a lo alto del Castillo que, acompañado por el Alcalde, Presidenta de la Asociación, Presidentes de Comparsas, Mayordomía, Reina de Fiestas y Damas se dirigirá a sus paisanos para pregonar unas Fiestas que Juan conoce muy bien desde pequeño.
Por Juan Solera Albero es posible que alguien no lo identifique. Pero si usted pregunta por Juan el médico "El Torero", la cosa cambia: todo el mundo lo conoce. Y es que en los pueblos, el mote o apodo como elemento diferenciador del apellido es una idiosincracia o forma de ser o si lo prefieren, un patrimonio etnográfico local que se transmite de generación en generacion. El mote "Torero" le viene de su padre, que también era mireno al igual que su abuelo.
Después de haber estado 20 años de médico en Alcaraz, actualmente trabaja en Albacete. Juan fue concejal de Sanidad del Ayuntamiento de Caudete entre el 1991 y 1994 y Diputado Nacional en Cortes durante más de medio año tras la dimisión de Matilde Valentin. Juan dio sus primeros pasos en la fiesta como moro para, más tarde, volver a sus orígenes ancestrales: mireno. Me dijo el otro día que ha estudiado y conoce a fondo los 21 pregones hasta ahora realizados y que el suyo hará mención de lo que sus predecesores han dicho. A continuación se interpreta El Caudetano, del maestro Juan Angel Amorós, para dar paso a La Retreta, el acto más multitudinario, alegre y bullanguero de cuantos se realizan. Finalizado el pregón y El Caudetano, da comienzo oficialmente la fiesta.
Por Juan Solera Albero es posible que alguien no lo identifique. Pero si usted pregunta por Juan el médico "El Torero", la cosa cambia: todo el mundo lo conoce. Y es que en los pueblos, el mote o apodo como elemento diferenciador del apellido es una idiosincracia o forma de ser o si lo prefieren, un patrimonio etnográfico local que se transmite de generación en generacion. El mote "Torero" le viene de su padre, que también era mireno al igual que su abuelo.
Después de haber estado 20 años de médico en Alcaraz, actualmente trabaja en Albacete. Juan fue concejal de Sanidad del Ayuntamiento de Caudete entre el 1991 y 1994 y Diputado Nacional en Cortes durante más de medio año tras la dimisión de Matilde Valentin. Juan dio sus primeros pasos en la fiesta como moro para, más tarde, volver a sus orígenes ancestrales: mireno. Me dijo el otro día que ha estudiado y conoce a fondo los 21 pregones hasta ahora realizados y que el suyo hará mención de lo que sus predecesores han dicho. A continuación se interpreta El Caudetano, del maestro Juan Angel Amorós, para dar paso a La Retreta, el acto más multitudinario, alegre y bullanguero de cuantos se realizan. Finalizado el pregón y El Caudetano, da comienzo oficialmente la fiesta.
Al Castillo han subido a pregonar las Fiestas maestros, curas militares, abogados, alcaldes, políticos, economistas, periodistas, empresarios, empleados de banca... En el 2006 otro médico de la Comparsa de Los Mirenos, Albertos Puche Mira, realizó un sencillo y emotivo discurso de inicio de Fiestas. El primer pregón se lo ofreció realizarlo la Asociación de Comparsas a José Serrano Amurrio en 1993. Al año siguiente le correspondió el turno a un Abogado del Estado, amigo de Vicente Lillo, Francisco Ruíz Risueño, quien nos deleitó con un brillante pregón. Recuerdo verlo desfilar vestido de moro con Los Atalahakes y disparando con el traje de Mireno a este albacetense que en 2010 fue nombrado Embajador de la Feria de Albacete.
El periodista José Hervás, al año siguiente, no estuvo a la altura de lo que cobró por el pregón. Este caso, el de los pregones de paga, fue el primero y el último. Angel Conjero Lillo, piloto de aviones y alto cargo en el Ministerio del Aire, lo hizo un poco largo. Los entendidos saben que el pregón tiene un tiempo máximo y que suele ser contraproducente si se sobrepasa.
Uno de los pregones más amenos fue el que nos dio Ángel Aguilar López. Como profesor manejó muy bien el lenguaje y nos recordó esas palabras y frases que, o se han perdido o que cada vez están más en deshuso. Antonio López Cantos, Rosario Díaz Nuñez, Fernando Albertos Solera, Mateo Sánchez, Ángel Pedros, Jesús Antonio Bausa, Manuel Bañon Requena, Ambrosio Sánchez, Joaquin Agulló, que fue Presidente de la Comparsa de Moros, Marino Escudero, Vicente Lillo López y Manuel Gracía Villaescusa han tenido el honor de ser pregoneros de las Fiestas de su pueblo.
El pasado año le tocó a Antonio Torres Pérez quien sufrió quemaduras hace 51 años el día que se bajaba a la Virgen y que en su pregón nos recordó la ayuda que le prestaron los caudetanos a todos los heridos por efecto de la pólvora.
El periodista José Hervás, al año siguiente, no estuvo a la altura de lo que cobró por el pregón. Este caso, el de los pregones de paga, fue el primero y el último. Angel Conjero Lillo, piloto de aviones y alto cargo en el Ministerio del Aire, lo hizo un poco largo. Los entendidos saben que el pregón tiene un tiempo máximo y que suele ser contraproducente si se sobrepasa.
Uno de los pregones más amenos fue el que nos dio Ángel Aguilar López. Como profesor manejó muy bien el lenguaje y nos recordó esas palabras y frases que, o se han perdido o que cada vez están más en deshuso. Antonio López Cantos, Rosario Díaz Nuñez, Fernando Albertos Solera, Mateo Sánchez, Ángel Pedros, Jesús Antonio Bausa, Manuel Bañon Requena, Ambrosio Sánchez, Joaquin Agulló, que fue Presidente de la Comparsa de Moros, Marino Escudero, Vicente Lillo López y Manuel Gracía Villaescusa han tenido el honor de ser pregoneros de las Fiestas de su pueblo.
El pasado año le tocó a Antonio Torres Pérez quien sufrió quemaduras hace 51 años el día que se bajaba a la Virgen y que en su pregón nos recordó la ayuda que le prestaron los caudetanos a todos los heridos por efecto de la pólvora.
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