Pedro Ortuño es el tercer cura que sube al Castillo a Pregonar las Fiestas desde que Pepe Amurrio realizara el primer Pregón, hace ya veintitantos años. Antes le precedieron en este cometido sus compañeros Jesús Antonio Bausa Lacosta y Manuel Graciá Villaescusa. Como los anteriores, este cura misionero, Canónigo de la Catedral de Albacete, conoce, y muy bien, las fiestas de su pueblo y sus entresijos. Por eso, pregonarlas -dijo- "es aportar mi grano de arena a la fiesta".
Pedro ha sido el mejor embajador de nuestros festejos en Burkina Faso (Alto Volta) donde estuvo 13 años de misionero. "Yo gravaba -dijo- los actos festeros aquí y después disfrutaba mostrándoselos a los habitantes de Safané", donde tenía la Misión.
En otro momento de su intervención se refirió a sus antepasados: "Mi familia ha vivido la Fiesta por la Virgen y para la Virgen. Yo he respirado, desde niño, el espíritu festero en mi familia. La alegría sana debe impregnar nuestras fiestas y tiene que servir para acercarnos más unos a otros buscando siempre el bien común de nuestro pueblo".
Del ruedo de bandera dijo "es el elemento singular de nuestra fiesta". Recordó cuando en 1992 Caudete ofreció al mundo, desde la Expo de Sevilla, "la singular manera que tenemos de rodar la bandera". Del volante manifestó que "rompe moldes con los de los pueblos de alrededor. "Pueblo bizarro y leal"... recitó algunos versos de los Episodios y expresó "tenemos que recordar a nuestros antepasados por las fiestas que nos han legado".
También mencionó la celebración del 400 Aniversario de la Comedia Poética y los trabajos que se realizaron para que nuestros actuales Episodios fueran declarados Bien de Interés Cultural. De las Capitanías y Escuadras dijo "realizan una Fiesta grandiosa con derroche de música. Qué sería de los desfiles sin el público". Finalizó el Pregón dirigiéndose al Director de la Banda para que empezara a sonar "El Caudetano". En la foto superior vemos a Pedro, concejal de Ganemos, felicitando a su tío.
Una hora más tarde, la Plaza recibía a los cinco Faroles de las Comparsas y, a la una, daba comienzo "La Retreta" que se ha convertido en el acto más popular, bullanguero, alegre y divertido para todo tipo de público de cuantos se celebran, sobre todo para los más jóvenes. Es, sin duda, la mejor forma de empezar la Fiesta: recorrer el pueblo bailando el farol al son de las Bandas de música.
Y, a riesgo de que me llamen pesado, quiero recordarles a ustedes otra vez la siguiente máxima: "sin música, no hay fiesta que valga" y, como decía Pedro desde lo alto del Castillo "...que la alegría sana impregne nuestras fiestas". Felices Fiestas a todos... y enhorabuena a Pedro por su emotivo Pregón.
Escuchándo este pasodoble es más llevadero visionar las fotos.
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