El empresario que en febrero tiró al suelo tres olmos en la Avenida Virgen de Gracia agrede físicamente al marido de la concejala de Ganemos Caudete por realizar unas fotos a un camino.

  
         El pasado jueves, el mismo empresario que el 19 de febrero tiraba al suelo tres olmos en la Avenida Virgen de Gracia con maquinaria pesada, agredía físicamente al marido de la concejala de Ganemos Caudete que se había parado a realizar unas fotos del camino que va a La Encina. El agredido fue al Cuartel de la Guardía Civil a cursar la denuncia ante la agresión fisica y verbal sufrida por parte de este conocido empresario local que inesperadamente se le abalanzó en el camino entre Caudete y La Encina.

          El Alcalde ha dicho públicamente, en el transcurso de dos Plenos, que este empresario ha realizado "gratuitamente"  trabajos de arreglo de las cunetas en el camino de La Encina y la carretera de Villena. Es más. Vísperas de las Fiestas Patronales animaba a los concejales a que contactaran con empresas locales  para que algunos actos festeros no le costaran nada al Municipio igual que él había contactado con una empresa local que "ha realizado trabajos -afirmaba- que le han salido gratis al Ayuntamiento". 

       Ya le dije al Alcalde en su momento que eso de la "gratuidad", hiciera el favor de contárselo a su "tía Rita" ya que la Administración Pública funciona con conceptos más serios donde queda constancia, en un expediente administrativo, qué se ha realizado, quien, bajo que condiciones, quien ha controlado lo ejecutado, cuanto ha costado, si se ha compensado con una deuda.... "El que regala bien vende si el que lo toma lo entiende", dice un acertado refrán que viene como anillo al dedo en este caso que, por tratarse de favores a la Administración Pública, suele ser la antesala del clientelismo y la corrupción, uno de los problemas que mas preocupa a los ciudadanos según la encuesta realizada por el CIS

      Sobre este mismo asunto, el partido socialista ha sido un poco tibio. Se pregunta en su página de Caudete la Calle lo siguiente: "Al parecer, un ciudadano por propia iniciativa realizó trabajos de eliminación de broza en la carretera de Villena y el camino de La Encina". Añade otros extremos, que ya le advertí al Alcalde, como que "estos trabajos se hicieron sin haber adoptado ninguna medida de seguridad" y que "estos trabajos son competencia de la Diputación". Tambien denuncian que hay quejas de algunos vecinos por " montones de broza que todavía no han sido retirados". Todos estos extremos son ciertos. "Al parecer" no es el término más adecuado, a estas alturas de la película.

      Porque los socialistas, como el resto del pueblo, saben perfectamente de quien se trata y también que no es otro que el empresario que tiró los olmos al suelo y que tiene abierto un expediente, por falta grave a la Ordenanza del Servicio del Agua Potable a domicilio, y que ahora, según el Alcalde, "trabaja gratis para el Ayuntamiento". Es el mismo empresario que el jueves pasado agredía a un concejal consorte y que sin embargo cuenta con el inestimable beneplácito del señor Alcalde porque "nos trabaja gratis" cuando todavía no nos ha dicho a cuanto ascendieron los daños materiales que causó en la Avenida Virgen de Gracia, si pasó por ventanilla, por qué lo hizo y si se le impuso sanción alguna por tan bárbaro e incívico proceder atentando contra bienes públicos. 

    Llegados a este punto, donde un pacífico ciudadano ha tenido que ir a denunciar agresiones físicas, falta en escena un Marco Tulio Cicerón que llame a las cosas por su nombre como hace este insigne escritor, orador y político romano en el Senado en noviembre del año 63 antes de Cristo - en la Primera Catilinaria- cuando se dirige a los senadores con la frase que lo hizo famoso y que todo estudiante de latín conoce: ¿Quousque tandem, Catilina, abutere patientia nostra? 

      ¿Hasta cuando, Catilina, abusaras de nuestra paciencia?, le inquiere Cicerón a Catilina despues de descubrir y reprimir una conjura encabezada por este, pretendiendo dar un Golpe de Estado. Esta claro que el empresario no es Catilina.... ni el Alcalde Cicerón. Pero podría emularlo, en defensa de los intereses locales, preguntándole, alto, claro y en público, tras una vergonzosa agresión física ...¿hasta cuando, querido amigo, vas a abusar de nuestra paciencia?. 

     El Alcalde no. Pero el pueblo esta harto de la actitud de este empresario que parece tener inmunidad y de su particular forma de interpretar las Leyes mientras que el Alcalde se pierde en alabanzas hacia su persona porque, afirma, "trabaja gratis para el Ayuntamiento". Y todo aquel que no secunda su tesis, es que le tiene manía. "Manda huevos"... que diría Federico Trillo. Como norma, respeto a la persona y realizo una critica de sus actos, como en este caso, de una injustificada agresión física al marido de una concejala. Las críticas  las cataloga nuestro Alcalde como "manías". ¡Tómate algo fresco!

¿Cuanto costó reparar este desaguisado? ¿Se pagó? 
¿Le impuso el Alcalde una sanción? ¿Se ha liquidado?