Desde las pasadas Fiestas Navideñas, lo que fue "El Morgull" está en funcionamiento donde antes estuvo el Bar Restaurante Los Mirenos. He visto como han reforzado la estructura del edificio para que no haya ninguna sorpresa en un edificio que tiene más de 150 años.
Pero, lo que más me llamó la atención fue el "aislamiento acústico" que una empresa especializada colocó en "techos y paredes". No. No han escatimado en un capítulo que tantos quebraderos de cabeza suele plantear como es aislar el ruido en un local de pública concurrencia para que no moleste a los vecinos.
Es precisamente el aislamiento -que no es fácil ni barato de conseguir- lo que me ha llevado a realizar la siguiente reflexión. Un local bien aislado como este -o como "El Liceo" que también gastó mucho dinero en una empresa especializada- obtiene el visto bueno del Ayuntamiento garantizando así que los vecinos colindantes no irán a quejarse por el ruido.
El problema se plantea cuando el personal sale a la calle con dos copas de más, un vaso en la mano y un cuerpo que todavía pide marcha y nos encontramos que la calle ....no está aislada.
No cabe duda que es en ese momento cuando se plantea, sobre todo en verano y fines de semana, otro foco de molestias que es totalmente ajeno al dueño del local. Porque, de salir los clientes a la calle como salen los feligreses de misa de doce...¡no habría ningún problema!.
Aquí es el Ayuntamiento quien tiene la última palabra para que no se monte el pitote en la calle. El local estará muy bien aislado, con su cancela reglamentaria.... Pero, si el personal no se dispersa civilizadamente, el problema del ruido no estará resuelto para los vecinos de los alrededores.
Cuando los de mi generación teníamos veintitantos años y salíamos de un Bar, recuerdo que teníamos la sana costumbre de irnos cada uno a nuestra casa. Ahora...no. Cada época tiene sus cosas.
Aquí es el Ayuntamiento quien tiene la última palabra para que no se monte el pitote en la calle. El local estará muy bien aislado, con su cancela reglamentaria.... Pero, si el personal no se dispersa civilizadamente, el problema del ruido no estará resuelto para los vecinos de los alrededores.
Cuando los de mi generación teníamos veintitantos años y salíamos de un Bar, recuerdo que teníamos la sana costumbre de irnos cada uno a nuestra casa. Ahora...no. Cada época tiene sus cosas.
Salen a la calle por 2 motivos, para poder hablar bien y por el calor.
ResponderEliminarNo se deberia prohibir en otro caso poner otros horarios
Se llama educación y respeto por los demás.
ResponderEliminarSi los demás están descansando yo no soy nadie para tener que molestarlos. Los egoístas de hoy día sólo se ven y respetan a si mismos, y así nos va.
Y si hablamos de locales sin insonorizar, como guaridas, gente que le encanta la música a todo volumen,gimnasios,etc. Nos faltaría blog.
ResponderEliminarLo que ocurre es que ahora no se puede fumar dentro de los bares, entonces la gente sale mucho más a la calle, ya sea invierno o verano, no es cuestion de generaciones.
ResponderEliminarTampoco es plan de generalizar... Pero por poner el ejemplo de este bar, hay muchos peores, sin insonorizar y en los que se montan peleas en la calle sabado si sábado también... Al que se queje de este bar, lo invito a pasar una noche de verano en mi casa, encima del Liceo y luego, que se queje de otros bares...
?vamos a ver¿Para habrir ese local cuanto papeleo y licencas ha tenido que hacer el dueño ¡muchos verdad!el sabado pase por la puerta de una guarida sobre las 12 de la noche y tenian la musica a tope en un local comercial que en el piso de arriba no se podria estar por que dos calles abajo aun se escuchava la musica y sin ningun permiso ,y que coste que no tengo nada contra las guaridas siempre que respeten a los vecinos
ResponderEliminarEn momento se lie algún follón en la calle, llamaré a la Guardia Civil.
ResponderEliminarEstoy hasta el moño.
Avisados estáis.
Puede usted llamar cuando guste, querido anonimo.Eso si, le informo de que el bar no es responsable de lo que ocurra en la calle (a no ser que tenga terraza), al igual que a usted tampoco lo culparían si se produce un altercado en la puerta de su casa sin que usted tenga nada que ver.
ResponderEliminarMenos amenazar y menos "estar hasta el moño" y más predicar con el ejemplo, que por aquí todos son ciudadanos ejemplares que no estorban ni entorpecen a nadie nunca y bajo ninguna circunstancia; menos ver la paja en el ojo ajeno, querido.
Tu tranquilo que tiempo habrá.
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