De lo mal que acepta el Alcalde la crítica. Le reitero una vez más que, ante el cariz que ha tomado la cuestión y su nula capacidad negociadora, que no quiere decir pagadora, lo mejor es que dimita.

   El Alcalde, una vez más, falta a la verdad e intenta confundir con interpretaciones personales que ni tan siquiera, presumiblemente, son compartidas por su partido. No se puede utilizar la Tv pública para desacreditar a las personas. Lo que tiene que hacer el Alcalde, como le he dicho en otras ocasiones, es analizar el problema, convocar la Concejalia de Personal  las veces que haga falta y, desde la raíz del problema, solucionarlo. No es el Alcalde el que puede dar lecciones a nadie. Y, a la vista de su réplica, no voy a desaprovechar la ocasión para pedirle su dimisión como responsable de Interior.

  Con respecto al artículo que publiqué en este blog el pasado sábado, dice el Alcalde en un escrito de réplica:"...voy a pasar a contestar al escrito que el concejal Joaquin Medina ha colgado en su blog criticando mi forma de proceder en el asunto de la Policía Local". A nuestro Alcalde ....no le gusta la critica. Un político que se precie debe admitirla máxime cuando la he realizado con el único objetivo de que el afectado "reflexione y se logre un cambio favorable que a todos beneficie."

    Del elogio ...no sacamos nada a no ser el incentivo de continuar haciendo lo que hacemos. Confíe, señor Alcalde, más en una crítica que en una adulación porque los aduladores viven de los favores. Yo no pretendo en ningún momento agredirte. Pero te diré que soy un afectado más, como todo el pueblo, de tu falta de liderazgo y de tu falta de capacidad negociadora para conducir una situación que pone en peligro la seguridad ciudadana.

   Porque, eso es lo que he hecho hasta ahora: criticar una gestión poco afortunada del Alcalde que ha desembocado con la presentación  en el Juzgado  de una denuncia por parte de 10 Policías Locales que lo han acusado de despótico y antidemocrático. Qué nos hubiera gustado a todos los caudetanos sino alabar una buena gestión del responsable del funcionamiento de la Policía. De momento, el funcionamiento ni es defendible ni puedo alabarlo por la sencilla razón de que no ha sabido evitar el conflicto. ¿Estoy defendiendo con esta afirmación la actitud de la Policia? El Alcalde confunde el "culo con las témporas". 

     Antes de que se llegara a la situación de enfrentamiento abierto a la que se ha llegado, se lo hice saber al Alcalde, a través de un ruego en el Pleno Ordinario de julio: "...la marcha -le dije- que llevas en la dirección de la Policía no es la adecuada para que funcione con eficacia. Tu falta de tacto y de capacidad negociadora pone en juego la seguridad ciudadana". Lejos de reflexionar se puso, como de costumbre, hecho un basilisco y me acusó de no aportar pruebas. Cogí el micrófono y le expuse que el deterioro en las relaciones Policia-Alcalde se debían "a la falta de tacto, de eficacia y a imponer más que a negociar". Perdió una oportunidad para corregir. Esto ocurrió en julio. 

  Como el problema se agravó en agosto y a primeros de septiembre 10 Policias estaban de baja, le volví a plantear la misma cuestión en el Pleno de septiembre: "....ruego -le dije- que se tome más en serio la Concejalía  de Interior porque hay mucho en juego y el ciudadano no aprecia eficacia en su gestión. Por lo tanto, le ruego que, en vez de molestarse por este ruego, procure traernos resultados positivos para el próximo Pleno  o su dimisión como responsable de Interior". 

  Una semana después, y tras presentar una denuncia en el Juzgado, dos Policias rompían el silencio y, en representación de los demás, criticaban la gestión del Alcalde públicamente. Como me había interesado por este asunto,  escuché la intervención y, a los dos días, publiqué en mi blog lo que había dicho la Policía. Era la primera vez que el conflicto trascendía a la opinión pública.

    En el escrito de réplica que me hace el Alcalde pone en boca mía todo lo que denunciaron los Policías. Vamos a ser serios. ¿A quien pretende confundir? Le ruego que rectifique porque yo solo me limité a transcribir literalmente la intervención de Vicente Penadés y Juan Albertos. 

   El Alcalde, en vez de replicarle a la Policía, se ha limitado a matar al mensajero. Eso sí. Admite que existe un problema como es que "la Policia lleva muchos años dividida" dándome implícitamente la razón al no haber sabido en tres años dar solución a este y otros problemas para no llegar a los Juzgados.  En vez de buscar el enfrentamiento, le ruego que se lea el articulo que publiqué el miércoles, 8 de octubre.


    Desconozco si Estarellas pagó la multa por estacionamiento indebido.  Pero... ¡ese no es el motivo de la polémica! Lo que denunciaba la Policía era que el Alcalde "..nos presionó para que retiráramos la denuncia". Le aclaro que ¡no lo digo yo! Lo dice la Policía y, que yo sepa, el Alcalde no lo ha desmentido todavía. Y eso puede ser considerado, aquí en toda tierra garbanzos, delictivo por abuso de autoridad y presunta prevaricación. Desde luego...no son modos.

     Me pide que le aporte soluciones. Se lo he dicho al inicio: "analice el problema, convoque la Concejalía de Personal las veces que haga falta y, desde la raíz del problema, aplique la solución más razonable". Tenga en cuenta una cosa: confundiendo a la gente y abusando de su autoridad no conseguirá nada. Ni de la Policía. Ni de nadie. Y recuerde que siempre es mejor la crítica que la adulación.