El Ayuntamiento está actuando como si realmente no hubiera crisis. Dicen una cosa… pero hacen otra muy distinta. Les ha costado, pero se han enseñado a hablar como profesionales de la política y se han convertido en expertos en realizar espectáculos propagandísticos de mucho boato como el organizado el otro día con la presencia del señor Barreda con el único objetivo de no perder de vista el voto y garantizarse la poltrona cuatro años más. Ya les contaré por dónde van los tiros de la famosa Wimax, que la cosa no tiene desperdicio.
Es cierto que nuestro Alcalde presume de colgar en el tablón de anuncios la Nómina como si fueran las “Tablas de La Ley”. Pero nadie nos cuenta cuánto gastan estos chicos desde enero a diciembre en gastos de representación como comidas, regalos, viajes, caprichos, hoteles, gasolina….y otras bagatelas.
Observen con detenimiento las fotos de la fachada del Ayuntamiento, antes y después, y dígame ustedes si en época de apretarse el cinturón procede realizar los cambios que se están llevando a cabo. Y esto no es lo más preocupante. Si son capaces de realizar estos innecesarios cambios a la vista de todos…¡qué medidas no se tomarán en áreas a las que el público no tiene acceso!
Es cierto que nuestro Alcalde presume de colgar en el tablón de anuncios la Nómina como si fueran las “Tablas de La Ley”. Pero nadie nos cuenta cuánto gastan estos chicos desde enero a diciembre en gastos de representación como comidas, regalos, viajes, caprichos, hoteles, gasolina….y otras bagatelas.
Observen con detenimiento las fotos de la fachada del Ayuntamiento, antes y después, y dígame ustedes si en época de apretarse el cinturón procede realizar los cambios que se están llevando a cabo. Y esto no es lo más preocupante. Si son capaces de realizar estos innecesarios cambios a la vista de todos…¡qué medidas no se tomarán en áreas a las que el público no tiene acceso!
En la planta baja del Ayuntamiento se están retirando rejas y cambiando ventanas de madera por marcos de aluminio con cristal de seguridad. El cambio de estas nueve ventanas en planta baja, que se encontraban en perfecto estado de conservación, se realiza por cuestiones meramente estéticas: para que las paredes del salón diáfano interior que va a quedar, después de tirar al suelo los tabiques, hagan juego con el decorado y la nueva configuración funcional interior. ¡Vamos mejorando!
¿Corría prisa acometer estos cambios? Los de las rejas y ventanas desde luego que no y la distribución interior, digo yo que tampoco. ¿Por qué gastarnos dinero en remodelaciones cuando los ingresos municipales son muy bajos como consecuencia de la crisis? Otra cosa es emplear a la gente que no tiene faena en trabajos que generen riqueza. Gastar dinero en quitar rejas y cambiar ventanas en buen estado de conservación no creo que sea buena política en estos momentos ni un ejemplo de sostenibilidad.
Estando el edifico del Ayuntamiento en suelo urbano Antiguo ¿por qué cambiar madera por aluminio? cuando se trata de madera de calidad especial como es el “iroko" . Por cierto …¿qué se tiene pensado hacer con las rejas y los ventanales?....¿se van a subastar o ya tienen dueño?....¿dónde está la ventana y la vidriera que se quitó de la escalera del Salón de Plenos que D. Paco Albalat encargó a vidrieros de Venecia y que el Alcalde D. José Puche colocó en una rehabilitación llevada a cabo en este edificio en los años 60?
En el entorno en que está enclavado el Ayuntamiento, suelo Urbano Antiguo, la madera es más aconsejable que el aluminio, máxime cuando esta madera tan solo tiene 15 años y está en perfecto estado. No hay que perder de vista que las Condiciones Estéticas de las Normas Subsidiarias en el casco Antiguo, recomiendan el uso de materiales tradicionales.
Lo más grave de todo, con 1.600 parados, es meterse a realizar cambios costosos que no son de primera necesidad. Hay otros mucho más económicos para cumplir criterios de sostenibilidad, eficiencia energética y respeto al medio ambiente.
La opinión generalizada es que el Ayuntamiento no tiene en estos momentos ingresos que justifiquen los gastos de la nueva estética que le están dando a la planta baja con esta rehabilitación. Al haber mas luz ….¿se va a trabajar sin consumir tanta energía eléctrica? No creo que compense. ¡Tambien se distraerá más la gente! y es posible que rinda menos. Ya veremos.
Acabaré el artículo como lo he empezado: estamos ante un claro ejemplo de despilfarro en época de crisis. Quienes nos gobiernan hablan mucho de ella pero ….¡como no la padecen! Nadie en su sano juicio llama ahora a un albañil para que le quite rejas y le cambie ventanas en buen estado para poner marcos de aluminio. Esta actuación es similar al cambio del Escudo: innecesaria, costosa e inútil.
El Código Técnico de la Edificación establece una etiqueta energética. Será para quitarse el sombrero si se puede demostrar que compensan los costes que se están realizando con una mayor calificación energética. Si no es así …¡habremos tirado el dinero! De momento ….¡rejas y ventanas! no sabemos dónde.
Con la cantidad de parados que tenemos y un mundo cada vez mas radicalizado, insolidario e injusto, antes que afrontar cambios de “cosmética” y “estética”, es más rentable invertir en agilizar la tramitación de expedientes y negociar “buenos convenios” para que el trabajador municipal esté más a gusto, mas valorado y mayor autoestima para que rinda más mejorando el producto, hacerlo más sostenible y eficiente, profesionalizarse y, en definitiva, ser más competitivo. ¡Ahí es donde le duele al enfermo!
¡Ese es el reto!, señor Alcalde, en vez de aplicar con el personal, como ustedes aplican, el “divide y vencerás” y la teoría de los “buenos y los malos”. El socialismo de Pablo Iglesias, ¡seguro que no decía eso!
Una vez conseguido el objetivo…¡ya cambiaremos rejas, ventanas, escayolas y ….pinturas! Pero con problemas, como por ejemplo, el de Pepi, conscientemente generado y ladinamente consentido en los despachos donde se toman las decisiones, no valen ni las “medias tintas” ni mirar para otra parte. Es como el que tiene cáncer y no va al médico
Acabaré el artículo como lo he empezado: estamos ante un claro ejemplo de despilfarro en época de crisis. Quienes nos gobiernan hablan mucho de ella pero ….¡como no la padecen! Nadie en su sano juicio llama ahora a un albañil para que le quite rejas y le cambie ventanas en buen estado para poner marcos de aluminio. Esta actuación es similar al cambio del Escudo: innecesaria, costosa e inútil.
El Código Técnico de la Edificación establece una etiqueta energética. Será para quitarse el sombrero si se puede demostrar que compensan los costes que se están realizando con una mayor calificación energética. Si no es así …¡habremos tirado el dinero! De momento ….¡rejas y ventanas! no sabemos dónde.
Con la cantidad de parados que tenemos y un mundo cada vez mas radicalizado, insolidario e injusto, antes que afrontar cambios de “cosmética” y “estética”, es más rentable invertir en agilizar la tramitación de expedientes y negociar “buenos convenios” para que el trabajador municipal esté más a gusto, mas valorado y mayor autoestima para que rinda más mejorando el producto, hacerlo más sostenible y eficiente, profesionalizarse y, en definitiva, ser más competitivo. ¡Ahí es donde le duele al enfermo!
¡Ese es el reto!, señor Alcalde, en vez de aplicar con el personal, como ustedes aplican, el “divide y vencerás” y la teoría de los “buenos y los malos”. El socialismo de Pablo Iglesias, ¡seguro que no decía eso!
Una vez conseguido el objetivo…¡ya cambiaremos rejas, ventanas, escayolas y ….pinturas! Pero con problemas, como por ejemplo, el de Pepi, conscientemente generado y ladinamente consentido en los despachos donde se toman las decisiones, no valen ni las “medias tintas” ni mirar para otra parte. Es como el que tiene cáncer y no va al médico
Joaquín Medina Iñiguez
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