Las fotografías que aparecen más abajo están tomadas la pasada semana. Se trata de la urbanización de la calle San Pedro. Sospecho que esta obra se debe de haber financiado con dinero de la Diputación o, tal vez, con reajustes de las otras que no se han ajustado al proyecto. Observarán que las aceras de esta calle tienen poca anchura: en algunos tramos no excede de 40 cms. Cuando esta calle se urbanizó por primera vez, hace más de 30 años, primaba el tráfico rodado y no existía obligatoriedad de realizar aceras con la suficiente anchura para que por ellas transitara un minusválido con garantías de seguridad. A esto hay que añadir que se asfaltó sin riego asfáltico previo y sin la compactación adecuada.
Con la llegada de la democracia se han ido elaborando Leyes y Normas que han ido favoreciendo la accesibilidad de unas minorías con problemas de movilidad como la Ley 1/1994 que, a la hora de urbanizar una calle, marca un itinerario peatonal accesible consistente en aceras con una anchura de 1,20 m. “para permitir el tránsito simultáneo de dos personas, una de ellas en una silla de ruedas”. Les recuerdo que la Ley de Accesibilidad de Castilla La Mancha es una de las mejores de España.
Con el POS-2010 se han urbanizado varias calles. Sólo se ha respetado la accesibilidad en la Calle Santa Inés ¡porque se han suprimido las aceras! Ha quedado bien. Pero en el resto no se ha tenido en cuenta la anchura mínima que marca la Ley de “Accesiblidad de Castilla La Mancha” para las aceras: calle Virgen de Gracia, Las Moreras y San Juan, con el agravante de que la red de agua potable ha quedado muy superficial.
El verano pasado celebramos, en el seno de la Agenda 21, que Caudete había sido galardonada con el premio “Ciudad sostenible”. Si se dan una vuelta, pronto observarán que la mitad de las aceras de la población todavía no son accesibles, incluidas las realizadas el pasado año. La última… la calle San Pedro. Otro gallo cantaría si los minusválidos estuvieran asociados, sin perder de vista que, mañana, cualquiera de nosotros puede necesitar una silla de ruedas para desplazarnos.
Un ejemplo: ¿que pasaría si una vecina pretendiera instalar una peluquería en esta calle, en la planta baja de su casa? Que el Ayuntamiento le dará Licencia si el proyecto y la obra cumplen con la Ley de Accesibilidad (anchura mínima, eliminación de rampas…). Pero… si el Ayuntamiento no hace las aceras accesibles, ¿no es esto una contradicción, señor Alcalde?
Y hablando de rehabilitación de calles: ¿cuando le toca la que tiene usted al lado de su casa, la calle Del Teatro? Sepa que no tiene nada contentos a los vecinos desde que en el último Pleno le oyeron decir “que ya estaban todas las calles del centro urbano rehabilitadas”. Le faltó a usted una aclaración: ¡todas!... menos una. Sepa también que los vecinos de esta calle somos aficionados a pagar impuestos, de los que una parte se destinan a que el Alcalde cobre a final de mes. Todavía está a tiempo de corregir. Usted sabe que corregir es de sabios.
Lo cierto es que nuestros políticos no demuestran interés para eliminar barreras arquitectónicas, a pesar de ser obligatorio y llevarlo en su Programa Electoral. La Propuesta electoral socialista nº 232 reza: “Ampliaremos el espacio de aceras peatonales”. Repito que nos han premiado como Ciudad Sostenible cuando no estamos mostrando atención a la accesibilidad y ni tan siquiera de lejos realizamos una “Gestión del agua como un Ciclo Integral” (Propuesta electoral socialista nº164), ni hemos “clausurado la Vieja Depuradora” y tampoco han movido un esparto por la constitución de la prometida “Comunidad General de Usuarios y Regantes de Caudete” (Propuesta nº 165). Tras lo expuesto, que no presuma nuestro querido Alcalde diciendo que se vuelve a presentar como candidato a la Alcaldía con los deberes hechos.
Y respecto al asfaltado de las calles en el Plan Parcial Sur I, muchos vecinos han coincidido en la misma apreciación: no hacía mucha falta. Incluso en la calle Alcalde Luis Pascual, entre La Zafra y Echegaray, una parte se ha quedado sin asfaltar y, si observan, comprobarán la innecesariedad de esta intervención. El proyecto especificaba que se fresaría y al no haberlo hecho, el nuevo asfalto se ha quedado, en algunos casos, más alto que la acera. Del asfalto de la calle Santa Ana, me disculparán, pero parece que lo han echado con los pies. Da la sensación de que se trata de una obra de tipo preelectoral, realizada de correprisas para cumplir la estadística.
Del accidente de una niña en las hogueras de San Antón
Con respecto al accidente de la niña que presenciando una hoguera le cayó un palo en la cabeza, lo primero que quiero trasmitir es su pronta recuperación y que todo quede en un susto. No conozco la versión oficial de los hechos o tal vez se ha dado y no me he enterado. De todas formas, sería interesante conocerla. Mi opinión es que todos somos muy permisivos dejando realizar una cantidad elevada de pequeñas hogueras “sin regular, sin control y sin las correspondientes medidas preventivas”.
Salvando las distancias con esta moda de hacer hogueras, ocurre algo similar a lo de las guaridas. Cuando se realizaba una sola hoguera, me acuerdo de niño, la Fiesta de San Antón era más entrañable, más familiar ¡más tradicional! Repito que tanta permisividad, por parte de autoridades y padres, no es nada buena teniendo en cuenta que estamos jugando con fuego. Se suprimieron con buen criterio las carretillas por peligrosas y el riesgo surge ahora al habernos acostumbrado a mirar hacia otra parte.
Joaquín Medina Íñiguez
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