Hace un par de días, el 1 de julio, me llegaba el Decreto por el que el Alcalde, en el ejercicio de sus competencias, entre otras el ordeno y mando, nos cesaba de la Junta de Gobierno Local a quien este escrito suscribe y a Julen Sánchez, del partido socialista, designando, en el mismo Decreto, a las concejalas del PP Mª del Mar Requena Mollá y a Mª Ángeles del Valle Gómez. La primera reflexión que me hago es que gobernando el PP en minoría, una medida razonable y sensata es haber dejado las cosas como estaban.
Le falta pues generosidad y tacto político a nuestro querido Alcalde y a quien lo asesora. Le dije que se había equivocado y, por teléfono, me vino a decir que donde hay patrón no manda marinero. Que él era un mandao del Grupo". Bueno. Hace poco más de una semana el Alcalde agradecía en público, en el transcurso del último Pleno, el entendimiento que había y que entre todos hubiéramos sido capaces de votar a favor de un Plan de Ajuste sin necesidad de haber tenido que recurrir a la privatización del agua potable, como el PP ha pretendido, desde el principio de la Legislatura.
Curiosamente, el Decreto lleva fecha 10 de junio. Lo que quiere decir que se redactó hace 23 días. Por error o intencionadamente, quien sabe, lo guardaron en el cajón hasta ver que pasaba con el famoso Plan de Ajuste. ¿Acaso no tenían confianza en que saliera adelante si lo daban a conocer el día 11 de junio? ¿A qué jugaban? Cuando hace 13 meses firmamos el Pacto, a regañadientes aceptó el Alcalde que la oposición formara parte de la Junta de Gobierno Local como ejercicio de participación política y de transparencia democrática. Ocurrió la siguiente anécdota por la que se torció el carro. A mediados de febrero hubo una pequeña confusión a la hora de comunicarle a Julen que al día siguiente se iba a celebrar Junta de Gobierno.
Por error, no le llegó al móvil la comunicación de la convocatoria. La electrónica, ¡ojo!, que a veces gasta malas pasadas. Julen, después de todo el mes de diciembre sin Juntas, recurrió los acuerdos que se tomaron en aquella Junta por no haber sido citado. El Alcalde ....¡se tomó el recurso por la tremenda!. Hasta tal punto que, de forma inmediata, dejó de convocar Juntas de Gobierno Local. Le dije que...¡se equivocaba de todas todas!. Que era desproporcionada su respuesta.
No me escuchó. Prefirió gobernar sin convocar Juntas con tal de que el representante socialista, como castigo, no cobrara por asistencia a las Juntas de Gobierno. Una respuesta poco democrática y, repito, desproporcionada ante un simple recurso. Piensa el Alcalde que el cortijo es suyo y aplica la teoría "... como hagas algo que me incomode te vas a enterar quien manda aquí y de lo que soy capaz". O lo que es lo mismo: ¡al enemigo ni agua! sin darse cuenta que al rival lo tiene en el partido contrario y al enemigo en su casa.
Este es el talante negociador del que presume nuestro querido Alcalde. A partir de ahora, con todos los miembros del PP, las Juntas de Gobierno, si es que las convoca el Alcalde, serán lo más parecido a una balsa de aceite. Una cosa que se preguntará el ciudadano: ¿se van a convocar, a partir de ahora, Juntas de Gobierno Local?
Lo cierto es que si el Alcalde convoca Juntas de Gobierno, alguien que este al loro sospechará con que fin las convoca: para que las concejalas del PP se lleven a su casa lo que le negó a Julen sin motivos, repito, por un simple recurso que no tuvo trascendencia ni supuso ningún quebranto para el Ayuntamiento. Yo mismo le dije a Julen que no procedía recurrir. Que antes debía haber preguntado, sin echarle más sal a la cosa. Hasta le hice un artículo al asunto. Ya veremos si se convocan Juntas de Gobierno a partir de ahora.
Le falta pues generosidad y tacto político a nuestro querido Alcalde y a quien lo asesora. Le dije que se había equivocado y, por teléfono, me vino a decir que donde hay patrón no manda marinero. Que él era un mandao del Grupo". Bueno. Hace poco más de una semana el Alcalde agradecía en público, en el transcurso del último Pleno, el entendimiento que había y que entre todos hubiéramos sido capaces de votar a favor de un Plan de Ajuste sin necesidad de haber tenido que recurrir a la privatización del agua potable, como el PP ha pretendido, desde el principio de la Legislatura.
Curiosamente, el Decreto lleva fecha 10 de junio. Lo que quiere decir que se redactó hace 23 días. Por error o intencionadamente, quien sabe, lo guardaron en el cajón hasta ver que pasaba con el famoso Plan de Ajuste. ¿Acaso no tenían confianza en que saliera adelante si lo daban a conocer el día 11 de junio? ¿A qué jugaban? Cuando hace 13 meses firmamos el Pacto, a regañadientes aceptó el Alcalde que la oposición formara parte de la Junta de Gobierno Local como ejercicio de participación política y de transparencia democrática. Ocurrió la siguiente anécdota por la que se torció el carro. A mediados de febrero hubo una pequeña confusión a la hora de comunicarle a Julen que al día siguiente se iba a celebrar Junta de Gobierno.
Por error, no le llegó al móvil la comunicación de la convocatoria. La electrónica, ¡ojo!, que a veces gasta malas pasadas. Julen, después de todo el mes de diciembre sin Juntas, recurrió los acuerdos que se tomaron en aquella Junta por no haber sido citado. El Alcalde ....¡se tomó el recurso por la tremenda!. Hasta tal punto que, de forma inmediata, dejó de convocar Juntas de Gobierno Local. Le dije que...¡se equivocaba de todas todas!. Que era desproporcionada su respuesta.
No me escuchó. Prefirió gobernar sin convocar Juntas con tal de que el representante socialista, como castigo, no cobrara por asistencia a las Juntas de Gobierno. Una respuesta poco democrática y, repito, desproporcionada ante un simple recurso. Piensa el Alcalde que el cortijo es suyo y aplica la teoría "... como hagas algo que me incomode te vas a enterar quien manda aquí y de lo que soy capaz". O lo que es lo mismo: ¡al enemigo ni agua! sin darse cuenta que al rival lo tiene en el partido contrario y al enemigo en su casa.
Este es el talante negociador del que presume nuestro querido Alcalde. A partir de ahora, con todos los miembros del PP, las Juntas de Gobierno, si es que las convoca el Alcalde, serán lo más parecido a una balsa de aceite. Una cosa que se preguntará el ciudadano: ¿se van a convocar, a partir de ahora, Juntas de Gobierno Local?
Lo cierto es que si el Alcalde convoca Juntas de Gobierno, alguien que este al loro sospechará con que fin las convoca: para que las concejalas del PP se lleven a su casa lo que le negó a Julen sin motivos, repito, por un simple recurso que no tuvo trascendencia ni supuso ningún quebranto para el Ayuntamiento. Yo mismo le dije a Julen que no procedía recurrir. Que antes debía haber preguntado, sin echarle más sal a la cosa. Hasta le hice un artículo al asunto. Ya veremos si se convocan Juntas de Gobierno a partir de ahora.
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