Como indica el título, con este trabajo Fran y Eva pretenden “dar a conocer la pintura desarrollada en la Villa de Caudete durante los siglos XV y XVI, así como las relaciones artísticas y culturales que en este periodo existieron con Valencia y que desembocaron en la llegada de obras de pintores valencianos o el encargo de obras de estos para la Villa de Caudete”.
Me dijo que no podía facilitar más información hasta que no lo publique la Universidad pero que, tras su publicación, nos facilitaría la dirección electrónica. El artículo consta de 5 fotos y 10 páginas. A lo largo de los últimos años ha ido recogiendo datos de los cuadros (de temas religiosos) de aquella época (uno de ellos todavía existe en la calle San Antonio Abad) a la vez que ha ido entrevistando a caudetanos que conocían estas obras en Santa Catalina.
Fran, de 46 años, es profesor del IES en Casas Ibáñez y su mujer Eva del IES de un pueblo de Valencia, Cárcer. Los dos son amantes de la Historia del Arte. Su padre, Gaspar Marco Conejero, nació el año 1930 en la calle Santa Ana nº 5, justo al lado de la casa donde nació el pintor Pérez Gil. Hoy vive en Valencia después de haber trabajado como maestro en los Escolapios en Albacete, entre los años 60-68, jubilándose en el 95 en un colegio de Escolapios de Valencia. Padece una grave enfermedad respiratoria que la mitiga pintando acuarelas en las que aparecen muchos rincones de su querido pueblo natal: Caudete.
Conocí a Fran hace 16 años cuando un grupo de amigos constituimos la Asociación Cultural “Amigos de Caudete” siendo su presidente Francisco J. Domenech Mira. Tenía la sede social en Paracuellos de la Vega nº 3 y, como fines, “el conocimiento, la conservación y la divulgación del patrimonio cultural caudetano”.
Como anécdota quiero recordar que el primer acto de esta Asociación tuvo lugar un 26 de julio de 1997 y que se celebró en el Claustro del Convento de Carmen con el título “La venerable Cofradía del Dulcísimo nombre de Jesús. Religiosidad popular y cultural tradicional en la Villa de Caudete”. Este primer “Cuaderno de Estudio de tema local” lo realizaron entre Francisco J. Domenech y Juan Carlos Andrés Ortega, fisioterapeuta de Yecla que por entonces trabajaba en Caudete. El acto fue presentado por Mª Victoria Liceras.
Poco tiempo después, la asociación dejó de funcionar aunque todavía dio tiempo para publicar dos interesantes artículos: uno sobre el castillo titulado “Apuntes para la Historia Medieval del Castillo de Caudete” (1995) trabajo que, de algún modo, significó el impulso para que, años más tarde, nuestros políticos se embarcaran en el proyecto de restaurarlo, escrito entre Fran y Domenech, y otro, publicado en la Revista “Zahora”, (Diputación de Albacete) en el que se recogían fotografías de todos los Retablos Cerámicos y su historia (1997), elaborado entre Domenech y quien suscribe este artículo.
Recuerdo a Fran dentro de aquel “reducido grupo de entusiastas por la cultura” como una persona amable, inquieta, muy motivada y siempre preocupada por desentrañar aspectos culturales del pueblo de su padre y sus antepasados, que él considera como suyo. Suele venir a Caudete con relativa frecuencia. En más de una ocasión se ha traído a sus compañeros en visita cultural-gastronómica para degustar una de esas gachamigas que, en los Mirenos, tan sabrosas le salen a Carmen.
Como he dicho anteriormente, no puedo facilitarles más datos. No obstante, el día que se publique les daré el correo para que gratuitamente puedan acceder a conocer este apartado cultural pictórico caudetano que Fran y su mujer Eva, con meticulosidad y paciencia, han ido recopilando. Les recuerdo que la revista, que se distribuye a través de muchas Universidades (EEUU, Inglaterra…), se llama “ARS Longa, Cuadernos de Arte”. Internet tiene la ventaja de airearlo todo y por todas las partes del mundo.
Joaquín Medina Íñiguez
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