No cabe duda de que nos toman por tontos al pensar que no nos enteraríamos que los Inspectores que había mandado el Banco de España para controlar el montaje del Circo de tres pistas en que se estaba convirtiendo Bankia habían comunicado a sus superiores que "los electrodos que estaban empleando para soldar los barrotes de las jaulas no eran los adecuados y podría provocar que los leones se escaparan y crearan pánico entre la población.
Llegaron a mandar hasta cuatro advertencias ¡muy claras! al Contramaestre del Banco de España que Zapatero había colocado en tan distinguida institución para controlar la situación. "O se cambia de electrodos o la cosa se pondrá muy fea", le dijeron los Inspectores a sus inmediatos superiores porque no veían claro la salida a Bolsa de Bankia tras las fusiones de las Cajas. Siempre el mismo problema: ¿quien controla al controlador?
No. No les hicieron ni puto caso. ¿Porque no era ningún primerizo y eso era motivo suficiente para no preocuparse?. Si fue así... se equivocaron todos. Los engañó..o tal vez se dejaron engañar.
Lo cierto es que resultó ser un fiasco este señor a pesar de haber sido Ministro, Vicepresidente y Presidente nada menos que del Fondo Monetario Internacional con la complicidad del que no tomó medidas para cambiar de electrodos de más resistencia. Porque... ¡avisado estaba el BE!, como se demostró hace unas semanas.
Y sin hacer caso de las advertencias para impedirlo, una buena mañana cogió la cuerda de la campanilla y como si se tratara de una Estación de ferrocarril, avisaba que el espectáculo se ponía en marcha para actuar en todas las capitales de provincia.
El Contramaestre sabía perfectamente lo de los electrodos. Pero ocultó la información suministrada por unos Inspectores que él mismo había mandado para controlar la salida a Bolsa....Este señor va ahora presentando sus libros como si nada hubiera ocurrido y como si no fuera con él la cosa.
Los daños que causaron los leones una vez sueltos fue de proporciones bíblicas. Ahora....¡nos siguen tomando el pelo!: están juzgando a los artistas de aquel Circo porque se gastaron 15 millones con tarjetas black, además del sueldo que tenían, cuando la fiesta costó más de 22.00 millones de euros. Una cosa parecida a los trajes de Francisco Camps.
La Justicia se esta comportando como aquel cordelero de pueblo que no había visto nunca el mar. Cuando un buen día lo llevaron a un puerto para que la viera lo que más le llamó la atención fue lo gruesas que eran las sogas con las que amarraban los barcos al puerto.
Juzgar a estos Consejeros por gastarse 15 millones cuando rescatar el Circo que montaron le supuso 22.000 millones al erario público es un caso muy similar al comportamiento del cordelero, pero justo al revés. Pedro Hernández Moltó estafó la confianza de todos los castellanos manchegos hundiendo la CCM y la Justicia, que se tragó lo de que era el animador cultural de la entidad, le puso una irrisoria multa de unos cuantos miles de euros.
La fiesta que organizó Moltó costó 7.600 millones de euros. Lo jodido y lo que cuesta entender, en el siglo XXI, y con 38 años de Democracia a las espaldas, es que la Justicia tenga a gente pudriéndose en la cárcel por robar una gallina mientras que los de la tarjeta black es dificil que pasen siquiera una temporada a la sombra para meditar lo que hicieron mientras otros pasaban necesidades y estrecheces....
No. No les hicieron ni puto caso. ¿Porque no era ningún primerizo y eso era motivo suficiente para no preocuparse?. Si fue así... se equivocaron todos. Los engañó..o tal vez se dejaron engañar.
Lo cierto es que resultó ser un fiasco este señor a pesar de haber sido Ministro, Vicepresidente y Presidente nada menos que del Fondo Monetario Internacional con la complicidad del que no tomó medidas para cambiar de electrodos de más resistencia. Porque... ¡avisado estaba el BE!, como se demostró hace unas semanas.
Y sin hacer caso de las advertencias para impedirlo, una buena mañana cogió la cuerda de la campanilla y como si se tratara de una Estación de ferrocarril, avisaba que el espectáculo se ponía en marcha para actuar en todas las capitales de provincia.
El Contramaestre sabía perfectamente lo de los electrodos. Pero ocultó la información suministrada por unos Inspectores que él mismo había mandado para controlar la salida a Bolsa....Este señor va ahora presentando sus libros como si nada hubiera ocurrido y como si no fuera con él la cosa.
Los daños que causaron los leones una vez sueltos fue de proporciones bíblicas. Ahora....¡nos siguen tomando el pelo!: están juzgando a los artistas de aquel Circo porque se gastaron 15 millones con tarjetas black, además del sueldo que tenían, cuando la fiesta costó más de 22.00 millones de euros. Una cosa parecida a los trajes de Francisco Camps.
La Justicia se esta comportando como aquel cordelero de pueblo que no había visto nunca el mar. Cuando un buen día lo llevaron a un puerto para que la viera lo que más le llamó la atención fue lo gruesas que eran las sogas con las que amarraban los barcos al puerto.
Juzgar a estos Consejeros por gastarse 15 millones cuando rescatar el Circo que montaron le supuso 22.000 millones al erario público es un caso muy similar al comportamiento del cordelero, pero justo al revés. Pedro Hernández Moltó estafó la confianza de todos los castellanos manchegos hundiendo la CCM y la Justicia, que se tragó lo de que era el animador cultural de la entidad, le puso una irrisoria multa de unos cuantos miles de euros.
La fiesta que organizó Moltó costó 7.600 millones de euros. Lo jodido y lo que cuesta entender, en el siglo XXI, y con 38 años de Democracia a las espaldas, es que la Justicia tenga a gente pudriéndose en la cárcel por robar una gallina mientras que los de la tarjeta black es dificil que pasen siquiera una temporada a la sombra para meditar lo que hicieron mientras otros pasaban necesidades y estrecheces....
No hay comentarios:
Publicar un comentario